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miércoles, 7 de octubre de 2015

VIAJAR PARA VIVIR--VIVIR PARA VIAJAR

                               Constantin Kaváfis

Siempre me ha conmovido la obra de Homero: "La Odisea".  Relata la vuelta a casa de Ulises tras la guerra de Troya. Su destino es Ítaca, lugar en el que le espera su esposa Penélope y su hijo Telémaco.

Leí la obra cuándo estaba en el instituto, incluso llegué a representarla en teatro. Un día me di cuenta que lo que más me gustaba y con lo que más me identificaba era con el Viaje en sí, con las aventuras y desventuras, con la oportunidad de conocerse a uno mismo.
En una feria del libro que hicimos en el instituto, cayó en mis manos y casi por casualidad un libro de poemas de Constantin Kaváfis. ¿Que casualidad no?

Comparto su poema en éste vídeo. 

Cuándo viajo, me acuerdo siempre de Ulises. El trayecto es muy importante.  Muchas veces andamos ansiosos con el GPS, que nos desvía por sitios inhóspitos para llegar a nuestro destino. A veces, no disfrutamos de los paisajes, experiencias y vivencias que quedan en el camino, nos centramos en el objetivo, en la meta, en el destino marcado por el "TOM-TOM".

Pués bien, si nos perdemos, no hay problema, porque eso nos permitirá descubrir lugares diferentes, emociones intensas (miedo, curiosidad, admiración, alegría, relajación, incluso tristeza). Muchas veces surgen discusiones con los compañeros de viaje debido a esta pérdida del camino correcto, pues bien, estas desavenencias son positivas, porque eso os ayudará a realizar una toma de decisiones en equipo, os obligará a hablar, y a compartir todas vuestras emociones en su más pura esencia,  os reiréis juntos cuándo lleguéis a vuestra meta. 

Pero bien, a veces, y a Ulises también le ocurre, un camino sin una meta tampoco es bueno del todo. Ulises tenía un destino importante: su isla, Ítaca, su mujer Penélope que tejía de día y deshacía el tejido de noche, y su hijo Telémaco, ello le daba fuerza para continuar su viaje.

 Yo pienso igual, cuándo no tienes una meta, aunque el viaje te enriquezca mucho, puedes acabar perdido en el océano.